Hoy leyendo el descodificador he descubierto a Gilles Peress, un documentalista fotográfico interesado en los conflictos étnicos y las tensiones entre las culturas que ha cubierto guerras civiles en Ruanda, Irán, Bosnia y la República del Congo.
Decía Albéniz en su blog que el periodismo ha muerto. Que un drama de proporciones bíblicas como el conflicto de la República Democrática del Congo, con más de cinco millones de muertos en los últimos diez años, es ignorado sistemáticamente por las televisiones.
¿Para qué enviar un equipo al Congo (con el consiguiente gasto en desplazamientos, vuelos, dieta, seguros,etc) cuando se le puede mandar a Torrevieja, donde se ha cometido un parricidio con violación sodomita que sale mucho más a cuenta?
Es mucho más lógico pagarle ese dineral a Julián Muñoz por una entrevista, y emitirla en 'prime time".
Fotógrafos como Gilles Peress son el testimonio en imágenes de lo que sucede a nuestro alrededor y que parece que a nadie le importa.
4 comentarios:
Es que a nadie le importa.
Me ha gustado visitarte.
Un saludo.
Y tantas y tantas cosas de las que tenemos que informarnos por nuestra cuenta porque a los informadores y a sus superiores no les conviene que pensemos por nuestra cuenta.
Instantáneas muy duras pero unas fotos buenísimas, tanto como imágenes como por su contenido, hechas por un fotógrafo que no parece que esté ahí para captar la imagen más sensacionalista que le dé fama, sino que está metido en el ajo.
Hay que empujar amigos, que nadie tire la toalla, aunque vayamos a perder seguro.
Claro que importa, claro que a algunos nos importa. y Peress lo comunica de una manera perfecta: sin tremendismo, con muchísima verdad.
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