El trece

No puedo decir que no soy supersticiosa. El número 13 nunca me gustó. Tampoco es que dijese 12+1 para referirme a él pero digamos que es un número al que ignoraba conscientemente y el maldito número parecía entenderlo. Hasta ahora. En cambio, el 3 siempre ha estado presente en mi vida. Vivo en el número tres, soy la tercera de tres hermanos, en el colegio yo era la número tres en la lista, mi fecha de nacimiento sumada da tres, etc. Pero desde hace algo más de un mes, el número 13 se me repetía constantemente. Sobre todo en el trabajo. Cuando pasaban las llamadas a mi despacho, lo hacían marcando R y después 13, cada vez que miraba el reloj eran las 13 y 13, en mi bandeja de entrada había 13 mensajes, así que, después de numerosas coincidencias empecé a pensar que intentaban decirme algo. Yo me preguntaba qué significaba esa persecución. Soy de las que piensan que nada es casual, que todo tiene una explicación. Al menos me gusta pensar eso. Y si no es así, no me importa. Yo siempre estoy atenta. El Universo está plagado de señales, de símbolos, de mensajes para descifrar. El caso es que deseaba con todas mis fuerzas ser despedida de mi trabajo. Después de casi un año de tedio, de soledad, de sensación de "día de la marmota" y de hastío necesitaba irme de allí. No podía marcharme porque estaba fija y de ese modo perdía indemnización, finiquito, el paro, todo. Así que por fin me despidieron el día 12 de Enero. Y el 13 de Enero empezaba mi nueva vida. Enero, mes primero (1) después de Diciembre (12) = Trece. En el Tarot representa a la Muerte. Pero no la muerte física, sino la transformación, la transmutación, el cambio. Otra etapa en la vida. Another break in the wall.