Me educaron para el éxito y mi mayor éxito es saber que no tengo educación.
Me educaron para competir y mi mejor competición es no competir con nadie.
Me educaron para ser fuerte, pero esta asignatura la tengo pendiente.
Me educaron para ser firme y mi firmeza es como el junco de la ribera, que se inclina amable con el soplo bondadoso de la brisa.
Me educaron para ser valeroso y aún me da miedo la oscuridad.
Me educaron para amar al prójimo, pero al prójimo, por lo que veo, no lo educaron para que me amara.
Me educaron para ser decidido y mi primera decisión aún está por tomar.
Creo que nunca quisieron educarme; tal vez domarme.
Ahora soy como un caballo salvaje que se encabrita no más quieran colocarle la brida de la educación.
Soy un loco, estoy loco ... allá los cuerdos con su educación!
El loco de la colina.
1 comentario:
Hola Marisa!
Encantada de conocerte :) Muchas gracias por tu visita. La verdad es que me ha gustado mucho entrar en tu blog y ver que realmente tenemos muchas cosas en común. Me encanta ese texto de Quintero, "El ladrón de orquídeas" es una de mis películas preferidas.. y también me gusta visitar flickr.com para ver fotos y tomarlas prestadas de vez en cuando :)
Seguiremos en contacto, un abrazo!
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