Me abochornan las "embajadas" catalanas, los informes que la Generalitat encarga a los amiguetes, la abundancia de campañas de autobombo, la conjunción de dispendio e ineficacia, el vuelo gallináceo del debate político en el "oasis".
Me abochorna la impavidez con que el anterior Gobierno autónomo gallego, esa coalición "progresista" de socialistas y nacionalistas, dio por supuesto su derecho a derrochar en coches blindados, mobiliario y francachelas; me deprime que el PP de Galicia, a estas alturas, siga apoyándose en los caciques cada vez que se aproximan elecciones (ahí, sin embargo, habrá que dar un voto de confianza a Feijóo).
Me abochorna, y no hace falta decir por qué, que Ibarretxe asegure que el PNV seguirá mandando, tanto si permanece en el Gobierno como si no: ahora resulta que el lehendakari vasco habla igualito que Girón de Velasco y otros figurones del búnker después de la muerte de Franco.
Me abochorna que Camps se niegue a explicar ante el Parlamento autónomo valenciano esa historia tan graciosa de los trajes, y que Fabra domine eternamente la Diputación de Castellón gracias a su talento para explotar el clientelismo.
Me abochorna que el PSOE gobierne siempre en Andalucía, aupado sobre su propia clientela rural y sus peonadas.Me abochorna, en general, la España autonómica, con sus cargos y carguitos, sus coches oficiales y sus trapisondas. No creo que el plan fuera ése. Hace 30 años se prometió que la Constitución, además de reconocer los derechos y particularidades de determinadas regiones (o naciones, o imperios, da igual: las palabras no cuestan un duro), serviría para acercar la Administración al ciudadano. Quizá esté más cerca, pero suele portarse como si estuviera lejísimos y no pudiéramos ver las tonterías que hace."
10 comentarios:
No estoy de acuerdo en alguna cosa puntual, pero en líneas generales tiene más razón que un santo.
Yo no estoy de acuerdo con lo de Galicia. Pero como tú dices, a grandes rasgos, es de vergüenza la asquerosa corruptela que tenemos por todos lados.
Bah, si no fuese por el jamón ibérico, el solecito y el Barça yo ya me habría pirado a otro país.
Ademas de estar totalmente de acuerdo contigo Maya... escribes estupendamente.
Carlos, no lo he escrito yo sino un tal Eric González. Pero muchas gracias igualmente!
Jota, solecito y tapas.. por lo demás, yo también me iba a vivir a la Polinesia (por ej.)
Hay que saber leer entre líneas:
"...acercar la Administración al bolsillo del ciudadano..."
Sigan pasando por caja, muchas gracias.
;-)
Puedo entender en líneas generales la indignación que transpira el artículo, pero creo que para criticar algunas cosas evidentes se le avistan un poco los prejuicios a su autor. En otras palabras, Enric no ha disparado con dardos, ha descerrajado un trabucazo.
supongo que cada uno de los 17 gobiernos autonómicos intenta barrer para sus casas, que por encima del la solidaridad (un valor escasísimo en política) están los intereses locales, la mirada corta. el estado de las autonomías significa multiplicar x 17 las vergüenzas (y los gastos) propios del hecho de gobernar. en teoría el sistema funciona, pero la práctica es un desastre. quizás habría que pensar en otra forma de hacer efectiva nuestra realidad plurinacional, nuestra diversidad. evidentemente no hablo de centralismo único, ya hemos sufrido muuuchos años terribles en ese sentido, sino de otro nivel de autonomía. o bueno, yo qué coño sé!!
Raúl: Pues claro! qué coño vas a saber de política si no eres político?? ;)))
Aún así, tienes las ideas más claras que muchos de los que dicen serlo.
Arnau, se notan sus prejuicios, es cierto.. con unos se ceba más que con otros pero sigo pensando lo mismo: en líneas generales, yo también estoy hasta los mismísimos de soportar tanto caciquismo, amiguismo y corrupción durante años y años en este país de chancleta y pandereta.. y que la justicia no actúe y la gente siga votando a los mismos. Me indigna!!
No se puede decir mejor ni más claro. Bueno, tal vez alguna mención a desastres como la Educación secundaria o la Sanidad, así como el modelo económico basado en el ladrillazo no habrían estado de más.
Publicar un comentario